Seguimos de verano y aprovechando que el lunes es festivo en Croacia nos vamos a pasar 3 días a la playa, en este caso visitaremos Zadar.
Esta es una de las joyas de la corona de la costa de Dalmacia, y de las favoritas de los croatas, quizás por su proximidad a Zagreb. También tiene una importante universidad, lo que hace que en invierno esté llena de estudiantes.
La ciudad antigua, también de estilo veneciano, es conocida por sus ruinas romanas.
No hemos tenido mucha suerte con el alojamiento, es una ciudad bastante cara, y hemos terminado de nuevo en una habitación que dista bastante de lo que ofrecen en internet.
Teniendo en cuenta que la ciudad vieja hace una especie de península, alojarse en la parte nueva es un poco alejado, puesto que tienes que callejear bastante para llegar. Tampoco hemos visto muchas paradas de autobús, ni autobuses circulando, por lo que no se si te puedes desplazar en transporte urbano.
Hemos llegado de tarde, por lo que después de asearnos y prepararnos, decidimos ir directamente a visitar la ciudad y cenar.
Todavía es temprano, por lo que podemos caminar tranquilamente y los restaurantes y terrazas aun están empezando a servir las cenas.
Hemos decidido probar un restaurante local, lo que comúnmente llamaríamos chigre, que ofrece pescado y marisco a muy buen precio.
Es un restaurante muy pequeño, con pocas mesas en una calle estrecha, pero la comida esta muy buena. Mejillones, frito de pescaditos, calamares y gambas, regado con dos cervezas por 38€. El restaurante se llama Konoba Tovar y esta en la calle Matice Dalmatinske 1.
Después de cenar nos vamos a pasear por una de las calles principales, Siroka ulica y llegamos a la iglesia católica de San Donato.
Cerca de aquí hay un mercadillo con puestos de pulseras e imanes, y al lado esta el paseo marítimo.
En el paseo marítimo cabe destacar el órgano de mar que suena por el empuje de las olas, el faro o el saludo al sol, paneles solares que por la noche crean un espectáculo de luces y colores.
En esta parte de la ciudad tenemos que destacar también el campanile de Sta. Anastasia y la iglesia de Sta. Maria.
Detrás de S. Donato hay una gran columna "Stup Srama" (o pilar de la culpa) dónde ataban a los presos para escarnio público en la Edad Media.
Y enfrente... el forum...
Al día siguiente nos vamos a una de las playas mas populares de la ciudad, Kolovare Beach. Como muchas playas de Croacia, no hay arena, como mucho algún banco de piedras y un pequeño paseo donde te toca tumbarte.
La playa esta bastante concurrida, y el agua se ve limpia y transparente. Cerca de aquí hay unas islas y el continuo movimiento de barcos de paseo y ferries hacen que el mar tenga bastante oleaje.
Durante todo el día ha hecho bastante calor, por lo que prácticamente no hemos salido del agua. De regreso a casa decidimos continuar por el paseo pegados a la costa a ver que playas podemos visitar mañana...
Después de descansar un rato, volvemos a la ciudad antigua para pasear y cenar.
Entramos por la plaza de los cinco pozos y subimos al parque para ver desde arriba la Puerta Terraferma.
Antes de entrar, nos paramos en este pequeño muelle en uno de los laterales de la muralla. Si continuas por la derecha, llegas al paseo marítimo.
Nosotros cruzamos la puerta y callejeamos paralelos a los restos de la muralla romana.
Hoy me apetece comer arroz negro, así que vamos callejeando y mirando los menús para ver donde nos sentamos a cenar hoy.
En Madijevaca ulica encontramos un restaurante estilo italiano, Restoran Bello, con muy buenos precios, así que decidimos sentarnos en su terraza.
El camarero en muy majo y nos hace sentir muy cómodos aquí. Estamos muy cerca de la iglesia de Sta Maria, por lo que no es raro estar en medio de la celebración de una boda.
Es típico aquí que de la iglesia al banquete, una banda tradicional te acompañe, alzando la bandera croata y tocando canciones populares.
El arroz estaba muy bueno, así que aprovechando la luz del día, tomamos fotos de nuevo de S. Donato y Sta Anastasia.
Y seguimos callejeando hasta prácticamente salirnos de la parte antigua...
Después de caminar un rato y para terminar de hacer la digestión, que mejor que sentarnos a ver el atardecer en el paseo marítimo.
Para el día siguiente preferimos ir a una playa un poco mas cerca del alojamiento que se llama Karma Beach.
Para llegar atravesamos una mezcla de pueblo restaurado con chalets modernos llenos de señales de aparta hotel y coches de matriculas extranjeras.
En general el ambiente playero es bastante familiar. Cerca puedes encontrar alguna terraza playera, pero no es turismo de barra...
Al igual que ayer hace muchísimo calor, por lo que es prácticamente imposible alejarse mas de unos minutos del agua, aunque el constante ir y venir de lanchas y barcos provocando el oleaje, hacen un poco difícil sentarse cerca de la orilla...
De nuevo volvemos por la tarde a la zona vieja a caminar y cenar. Hoy vamos a intentar cenar de nuevo en un restaurante típico. Aprovechamos que estamos en la costa para comer pescado fresco.
Entramos por la plaza Petra Zoranica, al lado de la iglesia de S. Simeón o la Plza. del Pueblo y vamos a callejear por las zonas que ayer estaban mas concurridas.
Pronto llegamos de nuevo al paseo marítimo. Lo que mas me extraña de esta zona, además de que la gente la usa como playa, es que no haya prácticamente terrazas o restaurantes que aprovechen estas vistas...
Tres días en Zadar no dan para mucho mas, prácticamente lo hemos visto todo, así que no queda otra que volver a repetir lo andado.
De nuevo nos vamos a la zona del primer día, y cerca del restaurante que os mencione, hay otro del mismo estilo, pequeño, con una terraza sin muchas mesas, pero los precios un poco mas altos. Restaurante Buza en la calle Putevac 3.
Pedimos una fuente de calamares fritos y otra de cigalas. Todo estaba muy bueno, igual que los días anteriores, pero si tuviese que elegir, me quedaría con el restaurante de la primera noche.
Y hasta aquí nuestra escapada a Zadar. Espero que os haya gustado. Eso si, elegid mejor que nosotros el alojamiento, jejeje.
Bego