sábado, 15 de abril de 2023

HUNGRIA: LAGO BALATON (EL MAR DE HUNGRIA)

 

Se acerca Semana Santa y al contrario que en España, donde estas fechas son muy concurridas (tanto para playeros como para penitentes) en Croacia es todo lo contrario, no se celebra ni jueves ni viernes santo y solo es festivo domingo y lunes de pascua. Aquí todo cierra y se encierran en casa a celebrar en familia con felicidad la pascua… Todavía no entiendo que el lunes todo el mundo te felicite la pascua…

No tengo muy claro que hacer, puesto que viajaría de sábado a lunes, si ir a Serbia (como son ortodoxos, allí todo se celebra una semana más tarde) o viajar a Hungría. Al final 4 días antes me decido por visitar el lago Balaton, a 3 horas en coche de Osijek.

En Hungría debes pagar viñeta si quieres utilizar la autopista y algunas carreteras son de peaje. Para no complicarme, yo me compré la E-Vignette de 10 dias que me costó 14,33€ (5.500 ft) (www.tolltickets.com). También la puedes comprar una vez que has entrado en Hungría en alguna gasolinera en la autopista.

Escogí el alojamiento más barato (30€ la noche) y por suerte está en mitad del lago en la orilla más próxima a Croacia. Ha sido una casualidad, porque más tarde, buscando información del lago, veo que hay opciones mejores, pero no es la peor.

No voy a reseñar el hotel, porque es un B&B básico, con la cama para dormir y poco más, pero como vamos en coche, nos permite llevar el kit de campista de supervivencia. Tengo la impresión de que lo típico para pasar las vacaciones en esta zona, es alquilar un hotel con cocina común y barbacoa.

Nosotros llegamos el sábado por la tarde y siendo esta una zona turística, supusimos que algo estaría abierto. No muchas cosas, pero al menos algunos restaurantes sí. Teníamos miedo, puesto que como he dicho antes, Semana Santa por aquí, es para estar en casa.

Nuestro alojamiento estaba en Balatonszárszó, más o menos a la mitad del lago, que tiene ni más ni menos que 197 km de recorrido y una superficie de 592 km2 .

Hoy hace frio, 6o y esta lloviznando, así que antes de ir a cenar nos acercamos al lago. Es una pasada, parece que estes en el mar, con razón lo llaman el mar de Hungría.




Aprovechamos para hacer el tonto un rato y sacarnos unas fotos y nos vamos a cenar. Aunque es festivo no hay mucho turista, y con el frio que hace, tampoco apetece estar mucho en la calle. Por suerte mañana dan sol, lo que nos hará más agradable el paseo.




En internet recomendaban visitar las siguientes ciudades: Zamárdi, Siófok, Vezsprem, Balatonfüred, Tihany y Keszthely.

Las tres primeras están al norte y cerca de nuestro alojamiento, las dos siguientes en la mitad en la orilla opuesta y la última al sur, cuya recomendación es visitar un palacio.

Nos decidimos por hacer ruta hasta Tihany, que es 1 hora y media en coche sin hacer paradas, y ya pensar por el camino, si nos vamos al sur al final de la tarde. Nuestro interés no era el palacio de Keszthely, sino las termas de Hévíz, que están a unos 8 km de esa ciudad.

Nos despertamos temprano el domingo y después de desayunar comenzamos la ruta.


ZAMÁRDI

 

Este punto es el mejor para ver la península de Tihany, porque en el resto de ciudades, no llegas a ver bien la orilla contraria.




También la recomiendan como playas, porque tienes una zona de césped con escaleras para entrar y salir del lago y un paseo con restaurantes y chiringuitos.





Aunque hace sol, el aire es bastante frio, así que, visto el lago, no hay mucho más que hacer.





Pensábamos que por ser domingo no tendríamos que pagar aparcamiento, pero todas estas ciudades tienen zona azul (o blanca más bien) y en algunas, debes pagar durante toda la semana. Desde que hemos llegado tampoco hemos visto ni bancos ni cajeros, por lo que no hemos podido cambiar a florintos. Los restaurantes aceptan tarjeta y en los puestos de recuerdos aceptan euros.

Por suerte, cuando fuimos a Eslovenia, el hotel de Ljubljana nos habló de la app Easypark. Con ella puedes pagar el estacionamiento temporal en varios países, entre ellos Hungría, por lo que no tuvimos problema para aparcar. También vi que muchos parquímetros te permiten el pago con tarjeta, pero no en todas las ciudades.

 

SIÓFOK

 

Es la ciudad más grande y se la conoce como la capital de Balaton. Es famosa por sus festivales de verano y tiene un puerto que parece que estes en el mar. Sin duda la ciudad más turística.





Uno de sus símbolos es la famosa torre del agua. Nosotros aparcamos en la estación de tren que está al lado y te lleva directo a la zona antigua. También es la zona donde se encuentran los principales bancos, por lo que pude sacar florintos, aunque sea para un café.

Desde allí nos fuimos a la costa y la verdad es que es muy bonito. Se ven casas enormes, en el pasado debió ser una zona de veraneo de gente rica. También hay tiendas de recuerdos y restaurantes.





Nos acercamos al paseo y no parece que estés en un lago, es alucinante. Hay un puerto y un pequeño muelle que te hace pensar que estás en el mar.





 

VEZSPREM

 

Después de la visita a Siófok nos alejamos de la orilla del lago para visitar esta ciudad. Los viajeros la recomendaban puesto que su casco histórico es muy bonito.



Aquí hace bastante más frio que en la orilla del lago y se ve que hay dinero, no solo por los coches de lujo, sino porque todos los edificios están restaurados y muy bien cuidados.

Metemos el coche en un parking, puesto que no tengo muy claro como aparcar en la calle, lo cual fue un craso error.

Nos vamos a visitar la parte antigua y cuál es nuestra sorpresa que todo está en restauración y la calle principal cortada, por lo que el paseo es solo de 10 minutos.









Estoy un poco enfadada, porque nos hemos desviado para ver precisamente esta parte de la ciudad y no podemos ver nada. Aprovechamos para comer en el único restaurante abierto en esa zona, donde terminamos los 10 turistas que hay a esas horas.

La comida ha estado bien y regresamos al parking. Después de varias dudas, y gracias al google translator conseguimos entender que se paga en la planta donde hemos aparcado, pero cual es nuestra sorpresa que no podemos pagar con tarjeta (esto también nos pasó en Ljubljana) y que no acepta el único billete que tenemos de 5.000 florintos.

Por suerte en ese mismo momento un chico va a retirar su vehículo y a pesar de no tener cambio para nuestro billete, nos paga los 800 florintos que cuesta el parking (2,35€). Insistimos en pagarle en euros, pero no lo acepta. Gracias a él pudimos salir del parking sin tener que ir a buscar cambio en una ciudad prácticamente desierta por las fechas.

Quizás por esta experiencia me gusto a un menos la ciudad, jajajjaaja

 

TIHANY

 

Sin duda la mejor ciudad del lago (de las que nosotros visitamos). Las experiencias de otros viajeros ya decían que eran las mejores vistas.




Llegamos sobre las 3 de la tarde y estaba llena. Está claro que todo el turismo de esta semana estaba aquí, jajajjaa

Tuvimos que callejear para encontrar aparcamiento, pero al final lo encontramos.

También aquí todo está abierto, así que pudimos comprar alguna cosa interesante, como cerveza con pimiento picante.




Nos dirigimos al paseo, donde estaba todo el turismo concentrado y nos fuimos a tomar algo. No solo las vistas son hermosas, sino que el día decidió regalarnos el mejor sol para poder estar a gusto en una terraza.






Son casi las cinco de la tarde y el balneario de Hévíz está a punto de cerrar, por lo que descartamos seguir rodeando el lago hasta Keszthely (casi dos horas hasta nuestro hotel) y desandamos el camino. Nosotros hemos optado por rodear la costa, pero desde Tihany se puede coger un ferry hasta Zamárdi. A nosotros no nos parecía practico y desconocíamos los horarios, así que nos hicimos la hora y media más larga del día jajajajaja.









El lunes tampoco nos animamos a visitar el sur y nos fuimos directos a Osijek. Como tenemos que pasar por Pécs, decidimos parar a comer. Ya visité esta ciudad antes, y me apetecía volver.






Aprovechamos para pasear bajo el sol, comer y continuar el camino a casa. Aunque el día estaba muy soleado, el viento frio hacía poco apetecible estar en la calle y aun nos quedaba una hora y media hasta Osijek.

Ha sido una escapada muy interesante, y aunque el tiempo no ha acompañado del todo, hemos podido desconectar y hacer cosas diferentes. No podía dejar escapar esta visita estando tan cerca. Se que en el futuro y lejos de aquí, no lo hubiese elegido.

Si te apetece conocerlo no lo dudes, eso sí, no te recomiendo hacerlo en temporada alta, porque las carreteras son muy malas y los pueblos pequeños. Si ya ha sido agotador recorrerlo sin tráfico, no me lo quiero imaginar lleno de coches.

Poco a poco voy descubriendo hermosos lugares así que, tras esta pequeña escapada, toca buscar otro destino…

 

Bego