Desde
el 1 de enero de 2023 Croacia entra oficialmente en el euro y el espacio
Schengen, esto quiere decir, que adiós fronteras con los países de la UE.
Para
estrenar este año, he decidido viajar a la cercana Eslovenia, a unas 4 horas en
coche de Osijek, de la que todo el mundo habla maravillas.
Será
un viaje de 1 semana, empezando por Máribor y Postojna, la costera ciudad de
Piran, el famoso Lago Bled y por último su capital Liublijana.
Me
arriesgo a viajar la última semana de febrero, puesto que Eslovenia es famosa
por sus pistas de esquí, pero por suerte ya han pasado las semanas más frías
del invierno y parece que el clima se ha puesto de mi lado.
Importante,
si vas a viajar por Eslovenia y usar las autopistas, debes comprar la conocida
como “viñeta”, que es un pago único que te libra de peajes. Por suerte la
puedes obtener con mucha antelación y online, eso sí, debes saber la matrícula
del vehículo con el que vas a circular, por lo que, si vas con vehículo
alquilado, tendrás que solicitarla en el momento de alquilar el coche.
Este
es el link oficial para solicitarla. En teoría solo es válida comprarla aquí,
aunque he visto aplicaciones que te ofrecen comprarla. Yo por si acaso, la
solicite directamente aquí.
https://evinjeta.dars.si/selfcare/en
DIA
1: MARIBOR - POSTOJNA
Nuestro
primer día hemos decidido hacer una parada en el camino e ir a Maribor en vez de
a Postojna directamente.
Según
el hotel no se puede hacer el check in hasta las tres de la tarde, así que
aprovechamos para salir temprano y hacemos parada para comer. Nuestra segunda
opción era visitarla en el viaje de vuelta, pero desde Liubliana hay 1 hora y
media de coche, por lo que tampoco nos desviábamos mucho el primer día, y
siempre es mejor hacer estas cosas al principio, cuando estas más descansado,
jejejeje
Desde
Osijek son 4 horas de camino, que gracias a la desaparición de fronteras las
cumplimos clavadas. Además, hoy es domingo y podemos aparcar libremente en la
calle. Dejamos el coche cerca de la parte antigua y comenzamos a caminar y
callejear.
No
es una zona muy grande, así que no tardamos más de una hora en recorrerla.
Antes de volver al coche (aun nos quedan casi 2 horas para llegar al hotel),
aprovechamos el buen tiempo y el sol que nos envuelve para disfrutar de un
refrigerio en una terraza.
Desde Maribor el camino a Postojna es fácil y directo por la autovía, nos liamos un poco al cruzar Liubliana, pero llegamos a nuestro destino sin mayor contratiempo.
El
hotel no está exactamente en Postojna, está en el pueblo de al lado, pero tiene
aparcamiento y es fácil de encontrar.
La
recepcionista es muy amable y nos invita a un refrigerio, el cual aceptamos
encantados después de todo el día de viaje. Tomamos nuestras cervezas y salimos
a una terraza común a airearnos un poco. Aquí está nublado y hace un poco de
frio, pero se puede estar perfectamente fuera.
No
nos apetece coger de nuevo el coche para ir a Postojna (5 minutos), y hay un
restaurante a 5 minutos caminando desde el hotel. Para ser la primera noche,
tampoco estamos muy exigentes, así que nos decidimos por el paseo. Parece que
no somos los únicos que hemos optado por este restaurante, porque está lleno y
muy animado. No recordaba que esta semana es carnavales y todos los chiquillos
están disfrazados.
Por
suerte, encontramos una mesa libre y tras mirar el menú me decido por una
ensalada de rosbif. No tengo mucha hambre, pero cual es mi sorpresa cuando me
traen un plato enorme lleno de ensalada con un entrecot que esta ¡!!
buenísimo!!!
Al
final se me ha alegrado el día, porque en Croacia no está fácil encontrar carne
de ternera y menos de tan buena calidad… Tras la cena y después de 6 horas de
coche, creo que ya es hora de descansar y mañana nos espera un día muy
interesante.
DIA
2: POSTOJNA – PIRAN
Hoy
el día ha amanecido totalmente metido en niebla. Nos hemos despertado temprano,
y después de desayunar hemos empacado nuestras cosas y nos decidimos a visitar
en primer lugar el castillo de Predjama.
Al
principio no tengo muy claro que sea la idea más acertada, puesto que con la
niebla no se si podremos ver algo. Por suerte está a 9 km de Postojna y cuál es
nuestra alegría al ver que, hacia esta zona, brilla un sol intenso.
Nos
dirigimos primero hacia a las cuevas de Postojna y ahí el googlemaps se vuelve
loco… Por suerte el castillo, está indicado por carteles, así que decidimos
pasar del GPS y continuar las indicaciones de la carretera, aunque por momentos
pensábamos que estábamos equivocados. Es una carretera estrecha y con muchas
curvas que finalmente cruza un pueblo y tras él, este maravilloso castillo.
El
castillo de Predjama es un castillo renacentista construido dentro de la boca
de una cueva. El castillo se hizo conocido como la sede del caballero Erasmo de
Lueger en el siglo XV (el barón ladrón) y era hijo del gobernador imperial de Trieste,
Nikolaj Lueger.
Según la leyenda, Erasmo entró en conflicto con los Habsburgo cuando mató al comandante del ejército imperial, el mariscal Pappenheim, que había ofendido el honor del difunto amigo de Erasmo y famoso condotiero Andrej Baumkircher de Vipava. Huyendo de la venganza del emperador del Sacro Imperio Romano Germánico Federico III, Erasmo llegó a la fortaleza familiar de Predjama. A partir de ahí, se alió con el rey Matías Corvino y comenzó a atacar las haciendas y pueblos de los Habsburgo en Carniola. El emperador encargó al gobernador de Trieste, Andrej Ravbar, la captura o asesinato de Erasmo. Erasmo fue asesinado después de un largo asedio. Según una leyenda popular pero infundada, Erasmo fue traicionado por uno de sus hombres y muerto de un tiro de cañón en su lavabo.
Por
suerte el haber ido tan temprano nos ha permitido campar a nuestras anchas y
hacer todas las fotos que hemos querido del paisaje y del castillo. Debajo del
castillo existen unas cuevas que solo se pueden visitar en primavera y verano,
puesto que el resto del año están habitadas por murciélagos.
Volvemos
a Postojna, puesto que tenemos entradas para ver las cuevas a las 10 de la
mañana, y nos piden estar 15 minutos antes de la hora de entrada. Seguimos
metidos en niebla y la temperatura es bastante menor que en el castillo.
Aparcamos a los pies de la cueva y caminamos 10 minutos hasta la entrada.
Excepto
si eres italiano, la visita se hace con audio guía. Vamos por grupos y con un
guía que nos indica continuamente el camino.
Para
entrar, es necesario utilizar un tren que nos lleva hasta la parte que se
recorre a pie, (1,5 km más o menos), siendo el total del recorrido de unos 5
km. La visita dura aproximadamente una hora.
Es
un sistema de cuevas que tiene 24,1 kilómetros y está formado por cuatro cuevas
interconectadas a través del mismo río subterráneo. Esto las convierte en el
sistema de cuevas más largo de Eslovenia y uno de los más largos de toda
Europa.
Dentro
está perfectamente iluminado, por lo que no te da sensación de agobio en ningún
momento. La temperatura dentro de las cuevas es de unos 10 ° C durante todo el
año.
Las
cuevas también albergan al endémico OLM, el anfibio troglodita más grande del
mundo. El recorrido por las cuevas incluye un acuario con un pobre espécimen
que debe estar harto de que lo miren todo el rato. La forma de este anfibio
recuerda a una cría de Dragon, de ahí que en la antigüedad se creyese en estos
seres.
No está
permitido fotografiarlo ni molestarlo (aunque algunos no lo entiendan del todo)
así que os dejo esta fotico de internet…
Salimos
de la visita sobre las 11 de la mañana y ya el sol luce esplendido en todo lo
alto. La verdad es que se agradece, porque después de tanta oscuridad, presta
que caliente un poquito.
Aunque
hay un solo restaurante abierto (no estamos en temporada alta), aprovechamos
para tomarnos un café y un sándwich para no tener que hacer más paradas antes
de nuestro próximo destino.
De
aquí nos vamos pitando a Piran en la costa eslovena. Desde Postojna se toma la
autopista hasta las afueras del pueblo, y a la altura de Portorož, te desvías a
una carretera costera.
El
acceso a Piran no es cómodo, puesto que partes de lo alto de la montaña hasta
la costa y no está permitido circular por la ciudad en coche, por lo que lo
debes dejar en un parking a las afueras. Nosotros lo dejamos donde nos lo
recomendó el hotel y tomamos el autobús gratuito hasta la plaza principal.
Una
vez que dejamos todo aparcado en el hotel, nos vamos a pasear por la ciudad. No
es que sea muy grande, así que no nos llevará más de un par de horas.
Paseamos por la “playa” de rocas. Después descubrimos que las playas realmente están en Portorož, y a pesar del viento que es un poco frio, la temperatura es muy agradable.
Nos
paramos en la plaza principal, plaza Tartini, a tomar algo disfrutando del
agradable sol de invierno. Al contrario que al lado de la playa, aquí se esta resguardado del viento y hace una temperatura ideal. Nos acoplamos a los locales y aprovechamos para descansar un rato.
Bajamos desde aquí a la otra parte alta de la ciudad donde se encuentra la iglesia de San Jorge (característica por su campanario) desde donde también hay hermosas vistas de la ciudad.
Obviamente
estamos en la costa, y algo de pescado hay que tomar. Esta zona también es la más
importante en vinos de Eslovenia. De momento, los dos vinos que me he tomado
estaban horribles, a ver si tengo suerte a la tercera…
Teniendo
en cuenta que estamos en temporada baja, la ciudad no ofrece mucho más, así que
decimos irnos a descansar y estar preparados para el día siguiente.
DIA
3: PIRAN - LAGO BLED
Nos
levantamos temprano y disfrutamos de un maravilloso y contundente desayuno en
el hotel. Es el único alojamiento del viaje que nos los ofrece incluido en el
precio, así que no lo vamos a desaprovechar.
Hoy
nos espera el trayecto más largo dentro del país, unas 2 horas hasta el famoso
Lago Bled. Aunque llegaremos mucho antes de la hora del check in, tenemos la
esperanza de que al menos, nos dejen aparcar el coche en el hotel.
En
Piran ha amanecido nublado, pero a mitad de camino ya son necesarias las gafas
de sol, porque nos acercamos a la montaña. Estamos teniendo mucha suerte, de
momento nos hemos escapado del mal tiempo.
Este
trayecto es también por autopista y es muy fácil tomar la salida hasta el lago.
Sin darnos cuenta ya estamos aquí. A pesar de que en el hotel me dieron un
montón de explicaciones para llegar, hemos dado con él a la primera, tampoco era tan difícil... Por suerte
nos dejan hacer el check in y podemos dejar ya todo en la habitación y
olvidarnos de volver pronto. El recepcionista es muy agradable y nos da una
serie de explicaciones sobre los puntos de interés principales.
El
recepcionista del hotel nos dijo que era una caminata fácil de unos 20 minutos…
Error…
Según
el plano parecía fácil, tan solo hay que subir a la montaña Ojstrica, donde hay
3 miradores: Mala Osojnica (el más cercano), Ojstrica y Velika Osojnica. Los 3
según las fotos de internet con unas vistas muy claras al lago… Error…
Aunque
al principio no lo teníamos claro, por fin aparecen las indicaciones y nos
dicen que Mala Osojnica son 20 minutos y Ojstrica 35 minutos. Optamos por el
primero pensando que será un sendero sencillo. A los 5 minutos ya se empieza a
complicar la cosa, es un sendero escarpado y estrecho con una inclinación
bastante pronunciada. Tras unos 15 minutos de subida y sin señales a la vista,
vemos bajar primero a un señor de lo más sereno (con su equipación de trekking,
pero con cara de poco esfuerzo) y luego a una pareja (vestidos elegantemente) de
lo más campantes, lo que nos anima a seguir. A pesar de que el sendero es cada
vez más escarpado e inclinado, pensamos que ya estamos llegando. Y llegamos… a
un banco en medio de la montaña que nos indica nuevamente Ojstrica a 15 min y Velika
Osojnica a 25 min… ¿Perdona? ¿En qué momento nos hemos pasado Mala Osojnica? ¡!!Imposible!!!,
si el sendero no tiene ni vistas ni ninguna otra opción de desviarse…
Ya
en el paseo popular y después de la frikada, buscamos donde comer, así que nos
paramos en el restaurante del camping a tomarnos una cerveza y comer algo.
Hemos
podido descansar un poco, así que seguimos recorriendo el lago. Como esa
caminata a 90° de 1 hora no nos pareció suficiente, decidimos subir al castillo
caminando también. Las indicaciones son de 15 minutos… yo ya no se si
creérmelo.
Continuamos
el camino ya por su última parte y llegamos al Blejsko srce o corazón de Bled
que esta como muy “mono” ahí al anochecer…
Aprovechamos
que ya es tarde y hoy cenaremos en el hotel, así que una buena ducha, algo de
cena y a descansar. Mañana nos vamos a la capital, Liubliana, a disfrutar la última
parte de nuestro viaje.
DIA
4: LAGO BLED – LIUBLIJANA
Desde
Bled se llega a Liubliana en unos 50 minutos. Tenemos el hotel en el centro
histórico, al ladito del famoso puente de los Dragones, así que nos toca dejar
el coche en un parking los próximos dos días (lo mas caro de todo el viaje)… También se puede aparcar en la
calle y usar la app Easypark, pero yo prefiero dejar el coche protegido y no
estar preocupándome por hacer el pago cada vez que toque.
Hace
un día maravilloso en la ciudad, brilla el sol y acompaña a caminar
tranquilamente por la ciudad.
Desde
el puente de los Dragones caminamos hacia el mercado y la Catedral de San
Nicolas y de ahí al puente triple.
Callejeamos
un rato dejándonos perder y llegamos al Rascacielos Nebotičnik en el que en su última
planta hay una cafetería con vistas a la ciudad. Aprovechamos la hora para
nuestro primer café en la ciudad y disfrutamos de las vistas y del sol
De
aquí nos vamos a pasear al Parque Tivoli pasando por la Galeria Nacional y la
Galeria de arte moderno
Continuamos
caminando hasta regresar al centro antiguo y ya por las horas que son toca
comer. A mí me apetece algo típico y de cuchara, así que recordamos que al lado
del mercado hay unas terrazas que ofrecen menús eslovenos ( esta es la ciudad
de la pizza tipo napolitana).
Pedimos
Bograč (guiso de carne y patatas) y Jota (sopa de habas, nabo y cebollas) con
una enorme y riquísima salchicha.
Un
poco cansados del viaje y del paseo, decidimos descansar un rato en el hotel y
luego volver a la carga. Esta vez nos vamos de paseo por la zona de Stari Trg y
terminamos tomando algo en una terraza “alternativa”. Hoy me he decidido a
probar el vino tinto, y elijo uno que según lo leído es especifico y
característico de Eslovenia y… no me ha gustado nada, la verdad.
Aprovechando
que estamos en una ciudad grande y que en Osijek me resulta muy difícil variar,
nos decidimos a cenar en el Barrio de Trubarjeva, barrio alternativo, que
ofrece comida take away. Nos decidimos por un restaurante árabe para variar.
Parece
que hemos conseguido aprovechar bien el día, así que nos vamos a descansar y
mañana a seguir con la visita.
DIA
5: LIUBLIANA
Segundo
día en Liubliana y hoy ya toca el día nublado (para el fin de semana se espera
nieve), pero no hace demasiado frio para ser febrero.
Hemos
dejado la visita al castillo para hoy, para subir a primera hora bien frescos.
Primero nos vamos a desayunar a Stari Trg y luego volvemos al mercado desde
donde se toma el teleférico que te sube al castillo. También se puede subir
andando o en coche. Teleférico y entrada son 16€ por persona.
Este
castillo es más bonito e interesante que el de Bled. Las vistas están muy bien
y tiene un museo que te explica la historia de su construcción. También hay una
capilla, se conservan las mazmorras y puedes subir a su torre del reloj.
Desde
la zona del teleférico nos vamos al barrio de Metelkova mesto, a unos 20
minutos caminando. Es un centro de cultura alternativa que se desarrolló a
partir de una ocupación en un antiguo cuartel del ejército. Reúne una variedad
de prácticas y eventos artísticos diferentes. Es el hogar de una gran cantidad
de clubes que albergan un programa regular de conciertos con artistas
clandestinos y DJ de todo el mundo. El centro también alberga representaciones
artísticas, exposiciones y un festival ocasional.
De
nuevo se acerca la hora de comer y optamos por los mismos restaurantes de ayer.
Aunque hoy no es día de comer en la terraza, nos convence sentarnos en uno que
tiene unas estufas. Hoy toca probar otro tipo de salchichas…
Ya
hemos visto prácticamente toda la ciudad, por lo que nos parece inteligente
descansar un rato hasta la hora de cenar, puesto que el frio empieza a hacer
mella en nosotros.
Para
cenar vamos a probar la pizza estilo napolitana… La ofrecen prácticamente todos
los restaurantes, algo tendrá de especial…
Caminamos
por el rio hacia la zona de la universidad de Liubliana por el Kongresni Trg,
donde hay una plaza muy bonita con unos edificios hermosos.
Teníamos
planeado ir a un restaurante en particular, pero al final optamos por quedarnos
por la zona del rio que con las terrazas y las luces parece más bucólica… Y
parece que no nos hemos equivocado. Entramos en un restaurante que a priori no
parece muy especial, pero pronto vemos que hemos acertado con la idea de la
pizza…
Hemos
sido incapaces de terminarlas, así que nos llevamos lo que sobra para el día
siguiente. Están deliciosas, esto no se puede desperdiciar. De aquí nos vamos a
descansar, porque mañana tenemos 4 horas de viaje hasta Osijek.
Sin
duda Eslovenia me ha encantado y es un viaje muy recomendable. En cualquier
época del año, seguro que encuentras una semanita para hacerte una escapada
como la nuestra… En pocos kilómetros puedes disfrutar de la naturaleza y la
montaña, del mar o de multitud de ciudades con encanto. Espero haberte
despertado el gusanillo…
Bego