Por
fin hemos conseguido nuestros pasaportes covid y eso nos permite salir por primera
vez de Croacia y cruzar una de las fronteras próximas a Osijek.
Llevamos
un tiempo planeando que ver por los alrededores y hemos decidido empezar por la
vecina Hungría, que siendo de la UE y dadas las circunstancias, nos parece lo más
seguro.
Esta
excursión será de un solo día y nos levantamos temprano con la intención de no
encontrar mucho lio en la frontera. Recordad que, aunque Croacia esta en la UE,
todavía no comparte ni moneda ni espacio Schengen, por lo que nos toca enseñar
pasaportes o DNI.
Nuestra
primera parada será la ciudad de Siklós, a una hora de Osijek, pero nos vamos
por carretera en vez de por la autopista, puesto que nos han dicho que este
paso fronterizo es más pequeño y rápido.
Siklós es la cuarta ciudad más grande del condado de Baranya en Hungría y es famosa por su espectacular castillo del S.XIII.
Lo mas interesante en visitar su interior. Este castillo es un museo de la costumbres, donde se puede ver ropajes típicos de la zona, ropas y utensilios de la guerra y en su parte inferior tienes las antiguas cámaras de tortura con multitud de utensilios de tortura. Me abstengo de subir ese tipo de fotos... También venden vino, puesto que esta zona es vinícola. No probé ninguno en esta ocasión, pero teniendo en cuenta que viene de la misma zona vinícola que Osijek... yo no soy muy fan de estos caldos...
Visitado el castillo, decidimos dar un pequeño paseo por el pueblo. Tampoco es que sea muy grande, pero aprovechamos para aprovisionar algo y hacer un pequeño tentempié.
De aquí nos vamos a la ciudad de Pécs, que esta a unos 30 minutos por carretera. Esta es una ciudad bastante mas grande que Osijek, mas de 150.000 habitantes y una de las mas grandes de Hungría también. Tiene los mejores ejemplos de arte otomano, construidos durante la ocupación turca (1543-1686). Entre los lugares de interés turístico destacan la catedral, la mezquita de Gazi Kasim Pasha y el Museo Arqueológico.
Comenzamos por la Basílica de San Pedro (neorrománica - siglo XIX) que es la catedral de la ciudad, y es uno de los lugares destacados que visitar en Pécs. Por fuera parece muy sencilla, pero llaman la atención sus cuatro torres y la puerta grabada con motivos de hojas de parra.
Terminada ya la visita de las zonas más emblemáticas de la ciudad (no es que las hayamos visto todas) y puesto que ya se acerca la hora de comer, decidimos descansar y sentarnos en una terraza a tomar algo y a pensar como matar el hambre.
Para
terminar el día, continuamos un rato paseando por los alrededores de la plaza
de Pécs, pero es sábado por la tarde, y en esta parte de Europa no es habitual que las tiendas
estén abiertas a estas horas, por lo que no podemos entrar ni a comprar un
recuerdo de esta visita. Pasamos por delante de la Sinagoga, también edificio emblemático de la ciudad, pero no entramos.
Decidimos terminar el día y volver de nuevo a Osijek, 1 hora y media de coche que aun nos queda por recorrer. Pasamos la frontera en el mismo punto y sin demasiado tráfico, por lo que pronto llegamos a nuestro destino.
Es habitual por estas carreteras encontrar animales salvajes como halcones, pequeños cervatillos, conejos o jabalíes. Por desgracia, un faisán ha decidido chocar con nosotros...
Termina el día de nuevo en casa. Por
fin algo diferente después de tantos días de prohibiciones. Será esta la primera de un montón de escapadas por los alrededores...